Una joven aparece muerta completamente desnuda. Ramon, un muchacho que vive en un pueblo cercano, es el primero en acercarse al cadaver. Apenas conoce a Adela, la muchacha asesinada, pero todos en el pueblo lo senalan como el novio de la misma. Incapaz de desmentir el rumor que crece con una intensidad imposible de detener, Ramon termina destinado a vengar a su nueva amada, convencido de que es su deber; y poco a poco en el pueblo de Loma Grande se empieza a esparcir el dulce olor de la muerte.
En la obra de Arriaga la muerte es siempre fiel companera de los vivos, ya que sin ella no tendrian razon de existir. Ella es el testigo de los avatares, sus ronchas se pueden ver y sentir en los cuerpos a medida que el tiempo pasa. La muerte es el elixir vital de la literatura de este chilango ciudadano del mundo, y a traves de ella conocemos las bondades y las maldades, la generosidad y la miseria que sus personajes, espejos de la vida, acarrean durante toda su existencia. Pura literatura. Esencial en este siglo que comienza, como toda la obra de Guillermo Arriaga: el olor de la dinamita condensada en palabras. Это и многое другое вы найдете в книге Un dulce olor a muerte (Guillermo Arriaga)